Del 27 al 30 de marzo se celebra en Pinto el campeonato de Europa de Boccia. La entrada para presenciar el campeonato internacional es gratuita, en el Polideportivo Municipal Príncipes de Asturias de Pinto. Participan 12 países (Azerbaijan, Bélgica, España, Francia, Holanda, Grecia, Hungría, Noruega, Reino Unido, Portugal, Túnez y Alemania) y 65 deportistas, además de 91 personas de staff técnico, 19 árbitros, 3 clasificadores, 30 voluntarios, 15 personas de organización y un representante BISFed.

La delegación española estará formada por 23 miembros en representación de las Comunidades Autónomas de Cataluña, Andalucía, Comunidad Valenciana y Comunidad de Madrid. De los 19 árbitros participantes, hay 3 españoles de categoría internacional y 9 españoles de categoría nacional o autonómica que ejercerán labores de jueces de línea.

El evento se ha presentado hoy 20 de marzo a las 12:00 horas en el Salón de Plenos del Ayuntamiento, con la presencia del Alcalde, Rafael Sánchez, acompañado de Javier Orcaray, Director General de deportes de la Comunidad de Madrid, Ricardo Navacerrada, Técnico responsable de Alta competición de Deporte Paralímpico del CSD, Jose Javier García, Presidente de la Fed. Madrileña de Deportes de Personas con Parálisis Cerebral y Julián Rebollo, Presidente de la Fed. Española.

El Alcalde de Pinto ha señalado en su intervención que "si el sacrificio y la fuerza de voluntad son valores intrínsecos al deporte, en el caso de disciplinas como la Boccia se ven aumentados por el tesón de sus competidores para superar dificultades".

El elevado nivel de las instalaciones deportivas pinteñas, capacidad hostelera, equipamientos y el resto de atractivos del municipio hacen que Pinto se convierta en destino privilegiado para campus, concentraciones, preparación de campeonatos o disputa de competiciones nacionales e internacionales. La celebración de estas citas supone también un beneficio para el municipio por los ingresos que genera en la hostelería y comercio local.

BOCCIA, TÁCTICA Y HABILIDAD
La Boccia es una compleja combinación de táctica y habilidad que practican personas en silla de ruedas que tienen parálisis cerebral o discapacidad física severa. Puede ser individual, por parejas o equipos, sobre una pista rectangular en la que los jugadores tratan de lanzar sus bolas lo más cerca posible de la pelota blanca que sirve de objetivo, a la vez que intentan alejar las de sus rivales, en un ejercicio continuo de tensión y precisión. Cada bando dispone de seis bolas en cada manga y gana aquel cuya bola termine más cerca de la blanca.