El Ayuntamiento de Pinto, a través de la Concejalía de Ecología y Modelo de Ciudad, ha estado presente en la segunda reunión del Grupo de Trabajo sobre Olores compuesto también por los ayuntamientos de Madrid, Rivas-Vaciamadrid y Getafe, así como por la Comunidad de Madrid y la Federación Regional de Asociaciones de Vecinos de Madrid. Con el fin de evitar episodios de olores, como el que se produjo el verano pasado causado por el acopio de material granulado de los lodos tratados en la Finca de la Torrecilla, se están manteniendo estos encuentros con una periodicidad al menos quincenal.

El objetivo de este grupo de entidades y administraciones es analizar y tomar medidas con respecto a los problemas de olores derivados de la acumulación de instalaciones de depuración y residuos que ocasionan molestias e inciden negativamente en la calidad de vida de los vecinos y vecinas del entorno en el Sur y el Este de Madrid.

Con respecto a la gestión de la Finca de la Torrecilla se está comprobando el expediente de la licencia del concesionario de la Finca, que data de 1992 y podría no adecuarse a las normativas y exigencias actuales.

El Ayuntamiento de Madrid ha confirmado al Consistorio pinteño que habrá una vigilancia para controlar que cualquier acopio que se estuviera produciendo no genere procesos de autocombustión con efectos de olores y gases. Además, con la incorporación al Grupo de Trabajo del Canal de Isabel II, titular de la gestión de las plantas de producción de lodos, habrá un mayor control y análisis de los procesos que se llevan a cabo en la finca para evitar la combustión que se produce por el acopio de material y sus consiguientes episodios de olor.

El Consistorio madrileño ha avanzado que se fomentarán alternativas de gestión que impidan los acopios de lodos, planteando otras posibilidades más sostenibles. Por último, la policía municipal establecerá mecanismos de control y vigilancia para evitar las condiciones que provoquen episodios de olor en el entorno. El objetivo final es la adopción de medidas conjuntas para la eliminación o minimización de olores producido por la suma de instalaciones de depuración y residuos en la zona.